Imparable el robo de combustible el país
➠ Las cifras no miente; negocio no solo de pobres
➠ Veracruz, paraíso del hampa que daña a Pemex
➠ ¡Claro, que fueron acarreados!
Como muchos otros problemas en el país, pese al discurso oficial, el combate al huachicol ha sido una de las guerras perdidas por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los datos, las cifras, son frías, no mienten.
Pese a llenar el zócalo de la Ciudad de México, poco hay que celebrar en el 85 aniversario de la expropiación petrolera.
Igual que en tiempos priistas, o del PAN, Pemex sigue operando con números rojos.
El robo de hidrocarburos en México sigue en aumento y hoy en día ya no solo son personas de bajos recursos o campesinos están en el “la industria”, sino también pequeños comerciantes, trabajadores y dueños de negocios de menor escala.
La ordeña de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) les permite obtener ganancias de hasta 50 mil pesos o más por semana, según reportes de prensa y oficinas oficiales.
Y es que a pesar de los riesgos de ser detenido o de perder la vida, esta actividad ilícita se ha vuelto atractiva para quienes viven cerca de los ductos de Pemex.
UN NEGOCIO QUE SE EXPANDE
El informe del Instituto de Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM) muestra una tendencia al alza a nivel nacional en cuanto al robo de hidrocarburos desde 2020.
Este delito se comete en más de la mitad de los estados de la nación, y ha habido un aumento significativo de la actividad delictiva en los últimos meses, a pesar de los esfuerzos del gobierno para erradicarlo.
Los datos proporcionados por Pemex revelan que en los primeros nueve meses de 2022, las pérdidas económicas por el robo de combustibles alcanzaron la alarmante cifra de 14 mil 243 millones de pesos, un aumento del 196.6% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
El robo de hidrocarburos sigue siendo un negocio lucrativo y en expansión, a pesar de lo que se diga desde el altiplano.
Además, el número de tomas clandestinas en los ductos de Pemex ha aumentado significativamente en el último año.
Durante 2021, se detectaron 11 mil 037 tomas ilegales, mientras que en el año siguiente la cifra se disparó a 13 mil 832.
Hidalgo sigue siendo el estado con el mayor número de tomas clandestinas, con 5 mil 790 detectadas durante el año pasado, seguido por el Estado de México, Puebla, Tamaulipas y Veracruz.
VERACRUZ, UN PARAÍSO DEL HUACHICOL
Y es en Veracruz donde la industria del Huachicol tiene uno de sus cinco paraísos en el país.
Datos del mismo IGAVIM revelaron que el robo de hidrocarburos en el estado de Veracruz aumentó en un 26,6% durante 2022 en comparación con el año anterior.
Según el informe, en 2021 PEMEX atendió 165 reportes de tomas clandestinas, mientras que en 2022 la cifra aumentó a 209.
Coatzacoalcos encabeza la lista de los municipios con más robos, con 31 tomas, seguido por Álamo Temapache con 29 casos, Tierra Blanca con 25 y Cazones de Herrera y Tres Valles con 13 cada uno.
DAÑO A INFRAESTRUCTURA
El análisis también muestra un aumento en la afectación económico por la reparación de las tomas clandestinas dañadas por el robo a nivel nacional, que equivalen a 686 millones 753 mil 958 pesos en 2022, es decir, un aumento del 34,7% en relación a años anteriores.
Obrador no solo ha fracasado en el combate al huachicol, sino que ha sido tal el atrevimiento del hampa que ahora expande el negocio al robo del gas licuado de petróleo o GLP.
“Hemos logrado prácticamente desaparecer el robo de combustible”, proclamó efusivamente el Presidente hace tres años. Lo cierto es que la realidad es otra, pese al discurso triunfalista.
AL OÍDO
Pese a que está aprobado que en muchas oficinas de gobierno a nivel municipal, Estatal y federal, trabajadores fueron llevados el pasado 18 de marzo en autobuses que en la gran mayoría de los casos pagaron las dependencias en las que trabajan, hoy por la mañana el presidente decía que son los conservadores los que llevan “acarreados a eventos políticos y no es Morena, ni la 4T que realiza esa acción”.
Andrés Manuel o vive en una realidad alterna, o le ocultan información o simplemente maquilla lo que es evidente.
¡Claro que hubo acarreados el 18 de marzo, como lo hacía el PRI y el PAN…!
No hay que negar que las palabras de Obrador se han convertido en un Evangelio y que muchos la creen al “pie de la letra”, sin tener en cuenta “los otros datos”.
joluperezcruz@hotmail.com
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Huachicol: la guerra perdida del Presidente
Crónicas del Poder | Por José Luis Pérez Cruz
