Agencias
Para operar, los transportistas tienen que pagar una cuota a alguno de los grupos del crimen organizado
Ser taxista en Acapulco se ha convertido en un trabajo de alto riesgo.
En lo que va del año, 25 taxistas y 2 conductores de Urvan han sido asesinados a balazos; además, 4 unidades han sido incendiadas en distintos puntos de este puerto.
Para operar, los transportistas tienen que pagar una cuota a alguno de los grupos del crimen organizado que tiene el control en su zona de ruta.
Si se resisten, sus unidades pueden ser incendiadas, son secuestrados e, incluso, asesinados en caso de que no accedan a la extorsión.
Los ataques contra los choferes han provocado la suspensión del servicio de transporte en las zonas poniente y oriente de la ciudad y se ha reanudado el resguardo de la Guardia Nacional.
En la última semana, las rutas Centro-Pie de la Cuesta, Centro-Pedregoso, Centro-San Isidro y Centro-Jardín Palma suspendieron el servicio en dos ocasiones.
En colonias como Emiliano Zapata, Ciudad Renacimiento, Simón Bolívar, Unidad Habitacional Casas Palenque, donde según las autoridades opera el grupo criminal “Los Rusos”, han sido asesinados al menos 10 taxistas.
En el centro y en colonias de la zona poniente, donde fueron ejecutados 14 taxistas y dos choferes de camionetas Urvan, operan “Los Rusos” y sus rivales del Cártel Independiente de Acapulco(CIDA), según los reportes oficiales.
“La verdad no le tengo ninguna confianza a las autoridades porque no imparten justicia. Hay muchos asesinatos en Acapulco y en todo Guerrero y lo único que hace la Fiscalía es abrir la carpeta de investigación”, reprochó Ventura Reyes, padre del líder de taxistas, Omar Reyes, asesinado en abril de 2023.
REFUERZAN OPERATIVOS
Ante la violencia que ha impactado al transporte en Acapulco, el Gobierno de Estado asegura que ha reforzado los patrullajes, labores de inteligencia y despliegues operativos, en coordinación con el Gobierno federal y municipal.
“Gracias a este trabajo conjunto, en las últimas semanas se ha logrado la detención de más de 180 generadores de violencia en el estado, varios de ellos vinculados directamente a los ataques recientes al transporte público”, señaló.
La violencia obedece a disputas internas entre grupos delictivos que, tras la detención de sus líderes, intentan desestabilizar sectores estratégicos, afirma la Administración estatal.
Con información de Reforma