Redacción/CDP Noticias
La síndica Yazmín Martínez Irigoyen se dijo satisfecha con la resolución de los magistrados de la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), en la que se determina que el alcalde Víctor Manuel Carranza Rosaldo ejerció violencia política en razón de género en su contra.
En entrevista, la edil morenista afirmó que fue un resolutivo justo, pues recordó que desde el 2018 inició su lucha ante el Tribunal Electoral de Veracruz (TEV) y hasta ahora un órgano jurisdiccional se pronunció a favor de sus reclamos.
“Me siento contenta porque la justicia tarde que temprano llega y las leyes también, podrán retrasarse un poco, podrá ser que en el camino no vean la situación, pero tarde que temprano la verdad sale a la luz y con esta resolución estoy satisfecha porque queda como precedente no solo para las mujeres del estado sino del país”, expresó.
Martínez Irigoyen confió en que instancias como la Fiscalía General del Estado (FGE) e incluso el Organismo Público Local Electoral (OPLE) y el Congreso del Estado actúen en consecuencia, pues así lo instruyeron los togados.
La apoderada legal del ayuntamiento hizo hincapié en que desde un principio buscó trabajar en unidad y coordinación con la primer autoridad municipal, “pero realmente a él no le caído el 20 de que existe una síndica, me relegan por el hecho de ser mujer, todo lo que involucra a la síndica a una servidora la hacen a un lado”.
Citó como ejemplo la elaboración del presupuesto y los estados financieros que mensualmente son enviados a la legislatura, ya que a pesar de que forma parte de la comisión de hacienda no se le informa nada.
“Todavía sigue la violencia, no ha entendido, no al 100, a lo mejor le bajaron un poquito, pero creo que se trata también de la formación del machismo tan arraigado, del misogismo, el mal asesoramiento, el actuar de mala fe, no para y ojalá que con esta resolución respeten a una servidora porque no hay de otra”, agregó la edil.
Yazmín Martínez añadió que las personas misóginas y machistas no deben estar en cargos públicos, pues “no dan apertura a las mujeres, como si no pensáramos y no pudiéramos con el cargo”.